martes, 5 de noviembre de 2019

Nacionalismo ucraniano y nacionalismo catalán.

Nacionalismo ucraniano y nacionalismo catalán.


Corría el año 2010 cuando el presidente nacionalista ucraniano Viktor Yushenko declaró como héroe a Stepan Bandera al igual que al resto de nacionalistas ucranianos que habían colaborado con los nazis en la 2° Guerra Mundial y era responsable del genocidio de Bolinya y la matanza de judíos durante la ocupación alemana entre otras atrocidades. Organizaciones y personalidades judías, polacas y rusas se opusieron a que el declarado criminal de guerra Stepan Bandera recibiera este reconocimiento por deseo de nacionalistas ucranianos, el parlamento europeo manifestó su malestar por la manera en que se honraba a un asesino quee había colaborado con el nazismo.
En el año 2011 el nuevo presidente Viktor Yanukovich consiguió anular semejante distinción basándose en un tecnicismo legal, pero causó la ira de los nacionalistas ucranianos, y tres año después esos mismos nacionalistas dieron un golpe de estado con respaldo extranjero que concluyó con la huída de Yanukovich hacia Rusia, su persecución como traidor a la patria y el estallido de una terrible guerra que los nacionalistas ucranianos siguen manteniendo contra todos aquellos que no se doblegan ante ellos. En un breve resumen:

1. En el año 2014 los nacionalistas ucranianos dieron un golpe de Estado que derribó al presidente Yanukovich.
2. El golpe que fue presentado por la mayoría de los medios occidentales como una revolución popular disfrutó del apoyo de servicios de inteligencia extranjeros y el respaldo de las organizaciones de Soros.
3. Nada más llegar al poder los nacionalistas ucranianos colgaron retratos de Adolf Hitler en centros oficiales y era común ver a las milicias nacionalistas saludarse brazo en alto.
4. También los golpistas ucranianos comenzaron a desencadenar una terrible represión sobre aquellas zona del país que no estaban dispuestas a someterse a ellos como el caso de Donestk y Lugansk que no han podido escapar del yugo nacionalista como lo hizo Crimea.
5. Aunque los prorusos del este de Ucrania se enfrentaron con los nacionalistas sin atacar centros civiles, los nacionalistas llevan bombardeando ciudades y poblaciones causando la muerte de ancianos, mujeres y niños.
6. Los crímenes sistemáticos perpetrados por los nacionalistas ucranianos que se apresuraron a elaborar listas negras de periodistas y políticos fueron ocultados por la mayoría de medios occidentales que los cubrieron con referencias a una supuesta amenaza rusa.
7. En durísimo contraste con esas noticias servidas por medios occidentales, desde abril del 2014, las oficinas del fiscal militar de Ucrania han abierto más de 27.000 investigaciones por acciones criminales perpetrados por las fuerzas armadas ucranianas.
8. Estás investigaciones afectan al menos a la cifra escalofriante de 43.000 soldados ucranianos.
9. Al menos la cuarta parte de los efectivos de la fuerzas armadas de Ucrania es sospechoso de haber cometido crímenes de guerra dirigidos contra la población civil.
10. La situación no ha mejorado en los últimos tiempos y de hecho desde inicio del 2018 la cifra de crímenes perpetrados por las fuerzas armadas ucranianas se eleva a 5.179.
La historia del nacionalismo ucraniano es un claro ejemplo de cómo podría contarse el día de mañana la historia de Cataluña, al igual que Cataluña, Ucrania jamás ha sido una nación independiente de Rusia, de hecho el primer reino ruso te voy su capital en Kiev, actual capital ucraniana, su nacionalismo independiente no surgió hasta el siglo XIX, siendo inicialmente muy minoritario y apoyado como el caso vasco y catalán por la iglesia católica.
De hecho el criminal Stepan pertenecía a la familia de un sacerdote católico, sólo la intervención de Alemania durante la 1° Guerra Mundial permitió a los nacionalistas ucranianos soñar con la idea de una república independiente, pero si gran oportunidad vino con la invasión hitleriana a la que apoyaron con gran entusiasmo. Sin la colaboración de los nacionalistas ucranianos, los nazis no habrían podido llevar a cabo el pavoroso exterminio de judíos que hicieron en Ucrania. Fuero los nacionalistas los que detuvieron, deportaron y enviaron a los campos de exterminio a buena parte de la población judía de Ucrania. La derrota de Hitler colocó a los nacionalistas en una pésima posición, de hecho, hubo un informe del departamento de Estado publicado durante la Guerra Fría y publicado en español por primera vez, que señalaba que no existía ninguna razón para considerar que Ucrania era una nación ya que siempre había formado parte de Rusia y su lengua el ucraniano no pasaba de ser un mero dialecto rural del ruso. La situación cambió dramáticamente con el colapso de la URSS que abrió la posibilidad de desmembrar Rusia,de hecho, Rusia perdió cerca del 30% de su territorio nacional a manos de fuerzas independentistas que como en el caso de Ucrania y Bielorrusia operaba en regiones que históricamente habían sido siempre rusas. Los nacionalistas ucranianos no solo impusieron el nacionalismo como dogma de fe, a la vez que establecían un sistema de latrocinio y corrupción, sino que en 2004 y 2014 desencadenó golpes de estado para recuperar un poder que habían perdido electoralmente. En el último caso desencadenaron una represión feroz sobre la población no nacionalista que súplica poder educar a sus hijos en su lengua natal, el ruso. Los medios occidentales, por regla general han ocultado estás realidades dentro de un plan que ambiciona convertir en una daga dirigida a la garganta de Rusia de la misma forma que hicieron en su día el Káiser Guillermo II y Hitler, aún más graves es que ocultasen la historia de los nacionalistas ucranianos de ayer y hoy,y esa ocultación llega a un grado criminal cuando por ejemplo una cuarta parte de las fuerzas armadas de Ucrania tiene abiertas diligencias por crímenes que en su mayoría han sido perpetrados contra la población civil. Para muchos esto sonará a nuevas o con incredulidad se leerá sometidos al engaño masivo de los medios, pero es lo mismo que veríamos en una Cataluña independiente gobernada por nacionalistas y que impondrían su lengua con exclusividad persiguiendo el español, seguirían una política agresiva contra España alegando que es una amenaza y que tiene sometidas partes de su territorio como Baleares o Valencia. Se valdrían de organizaciones como las de Soros para atacar continuamente España, culparían de todas sus desgracias históricas a España, como si otras partes de España no hubieran sufrido las desgracias de diversos regímenes. Convertirían en héroes nacionales de Cataluña a criminales de guerra como Lluís Companys, implantarian una censura contra artistas y periodistas, no vacilarian en dar golpes de estado si de esa manera se podían mantener en el poder y exterminarian a los disidentes sin dudarlo aunque fueran ancianos, mujeres y niños. Todas esas conductas con excepción del exterminio físico las llevan desarrollando los nacionalistas catalanes desde hace décadas sin que nadie los hubiera parado los pies, pero no cuesta imaginarlo con la última circunstancia en caso de acceder a la independencia buenas encontrar alguna resistencia.
Si alguien desea comprender la realidad del nacionalismo ucraniano, no tiene nada más que enterarse de las noticias en Ucrania por encima de la mayoría de la propaganda de los medios de comunicación, y es importante que así sea porque lo que padecen los ucranianos no nacionalistas desde hace años hasta el día de hoy es lo mismo baje puede suceder con los catalanes no nacionalistas en algún punto de un futuro no lejano.
En el tiempo que les ha llevado leer este texto, la deuda pública española a aumentando en más de un millón de euros y buena parte va a parar a los cofres de los nacionalistas catalanes e incluso a mentener nuestras fuerzas armadas en el este de Europa, que nada se nos ha perdido allá.
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